Hay algunos días que lanzaría todo por la borda.
Si, hay algunos días que hasta vuelvo a pensar en ti.
Y eso que ya nunca paso por tu casa, te creía tan olvidada…
Pensaba que todo terminó aquella mañana.
Un largo camino de tierra y la nube de polvo fue tu beso de despedida.
No puedo contenerme tantísimo tiempo este nudo en la garganta.
Trago y por más que trague, no se me va tu sabor.
A tierra.
Sé que no puedo vivir así, no puedo levantarme por las mañanas,
encender la luz, y fijarme con los ojos pegados si aún estás en esa fotografía.
No sea que te vayas también de ella y sólo dejes más que tierra.
Me compré un velero, no sé si te lo habrán dicho.
Si, sé que te gustaba el mar, y aunque lo hice para tenerte cerca sin tenerte,
lo hice para quitarme tu sabor a tierra.
1 comentario:
Precioso!!
el mar es Sabio....bucea más allá, deja que las olas te ahogen y cuando ya ningún coral ni arrecife vislumbres...el mar te rescatará
son las sirenas invisibles del fondo del mar...que nos llevan a la isla de calma
porqe después de la tempestad .... ;P
bico
Publicar un comentario