sábado, octubre 27, 2007

Útero

Es complicado "reiniciar" cuando nadie ha apretado el botón.

Es jodido esperar que alguien te escriba el guión y dejarte llevar por su película.

A veces es complicado ser el director y guionista al mismo tiempo máxime cuando uno no ha querido rotular la más mínima palabra.

Es ser espectador del espectáculo de la vida misma, manos que se entrelazan en algo inesperado.

Sentir algo nuevo. ¿Amor? ¿Tergiversación de una carencia suplida en dos alientos con baja frecuencia en el pequeño abismo de un oído?

Buscamos una razón, un sentimiento en esta razón de ser, y mientras tanto perdemos momentos tan sencillos como un entendimiento con un asentar de cabeza, una aclaración que no entendemos -el orgullo es nuestro enemigo- una expresión de confianza que a veces la infravaloramos.

No busques ningún entendimiento a tu vida, ni quieras que una corte te sigua y que te recen el día de tu funeral.

Lo que labras cuando plantas es lo que vas a cosechar.

Plántate a ti mismo y crece con los tuyos, no hay nada más bonito que la experiencia y el futuro impregnados en semillas.

Ama, quierete. Sé feliz y agradecido. Maréate en tu noria e invita a los tuyos.

Arriésgate, porque nada tienes que perder, y nada tienen ellos que apostar.