viernes, noviembre 17, 2006

En noviembre también puede ser primavera

Es increíble como aquella planta que abarca una pequeña parcela de mi ancho corazón va creciendo con los años, va madurando y crea cada vez unos frutos con los jugos más embriagadores que te puedes llevar al paladar.

El tiempo pasa y la época de floración me regala un pétalo tan cálido como tus mejillas.
El polen que da tu flor atrae a los más diversos insectos que ayudan a crear más vida mucho más allá de mi parcela y la tuya, en una explosión de vida tan exacta, como la circunferencia de tus aros que penden de ti.

Creces y las épocas en las que tus flores se marchitan, siempre queda la esperanza del nuevo brote, de los días claros sin nubes oscuras que no traen lluvias, sino más que lágrimas.

Mientras tanto, yo te pondré cada día un poquito de abono aunque alguna vez se me vaya la mano con la dosis, aunque quiera que vuelvas a florecer tan rápido como mis ansias de verte danzar en abril.

Intentaremos que sea primavera en noviembre, agua no nos falta.

Y luz: la tuya.

Dedicado a una niña que ya se me hace mujer. Besos, mi pequeña.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es que noviembre es un mes precioso!!! jejejej ;P

Todo puede suceder en noviembre!

Siboney (Gaia)

Black Swan dijo...

Y lo bien que se duerme en noviembre???

Este sábado dormiré hasta las dos, si me dejan...