Como un zorro en plena cacería.
A veces corriendo detrás de la cena y otras veces corriendo delante de jinetes por mera diversión suya.
Es injusto como unos tratan de sobrevivir con centímetros cúbicos escasos de aire y otros no saben a donde poner más ventanas.
Las habitaciones ya no son refugio, mis libros se aglutinan en polvo y mis discos están tan cansados de girar en su vida como su propietario.
Las calles acumulan bares y mientras que el horizonte del asfalto se rompe por tráfico de coches sin control, con la música rompedora y sus hígados se disuelven entre alcohol; mi rumbo ya se centra en estabilizar mis pasos y preguntarme una y otra vez si mereció la pena contar secretos a una botella, intentar intercambiar sonrisas con aquella camarera que finge mejor que trabaja o intentar entrar en una especie de concurso a ver quien es el más borracho sin perder la simpatía más cortante e inteligente.
No sé, a veces me pongo la piel de zorro y salgo a comerme el mundo de necios y tampoco se está tan mal.
Quizá porque ya me he cansado de estar corriendo delante de ti por mera diversión tuya.
2 comentarios:
Hola
estoy perdida, estoy enferma, estoy aislada...
pero como siempre la mayor parte sin tiempo, que suele ser bueno
y tu?
desenmarañando tu mundo?
(la salud va mejorando ;P Sin fiebre ya)
Si, un poco con aires revolucionarios intentando dar giros a todo a base de golpes.
Ya vi el correo y espero que salgas pronto del bache.
Muchos besos.
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