sábado, septiembre 09, 2006

Aqualandia is closed

La vida es como un parque acuático.
Esperas tu turno deseoso mientras haces horas y horas de espera tras una cola interminable mientras contemplas al fondo un hermoso tobogán de mil formas.
Con sus curvas, zonas cerradas, zig zags de vértigo y dosis de adrenalina por doquier.
Ni siquiera sabes qué te espera, pero te imaginas que debe de ser bueno.
Tu turno llega y ves el impresionante descenso que te espera.
Saltas cojiendo aire, cerrando los ojos y de un salto te deslizas por el enorme tubo. Reaccionas abriendo los ojos mientras no paras de sonreír hasta que se transforma tu boca en sonoras carcajadas y gritos de alegría.

Al final, un colchón de agua te espera y te embulles dentro mientras miles de burbujas y espuma te va rodeando todo tu cuerpo en un suave abrazo tras el impacto.
Bonita instantánea se observa desde el fondo. Pies que tratan de huir de una inversión inexistente, luchando por salir de ahí cuanto antes para poder disfrutar de nuevo esa sensación. Subir de nuevo. No te importa subir esa cuesta con los pies descalzos. Ni esperar horas y horas en la cola.

Hasta que los pies te sangran, hasta que terminas por sangrar…

No hay comentarios: